Este guapo gay bigotudo en una relación a veces echa de menos los tiempos en que follaba duro cuando era soltero. Afortunadamente puede pajearse mientras observa a su vecino muy exhibicionista y pasivo. Al tío le encanta exhibirse y sabe que hay alguien ahí, así que aprovecha para excitar al macho de enfrente. Se acaricia, enseña su culito, juega con él... Y el guapo bigotudo no pierde detalle, masturbando su gran polla de macho y observando todo esto con una mirada viciosa y dominante.