Este rubio va a la peluquería y mientras espera su turno se encuentra con una revista porno. Al peluquero le gusta ponérsela dura a sus clientes y luego chuparles la polla. El rubio no pregunta nada y empieza a empalmarse mientras mira la revista. Cuando el peluquero empieza a peinarle se da cuenta de su erección y acaba poniéndose de rodillas para hacerle una gran mamada.